viernes, mayo 12, 2006

Nosotros, los ciudadanos

En nuestras ciudades del gran Buenos Aires, crece el mismo consenso cada vez más aceptado en todo el país; La participación ciudadana es la clave. Una profunda crisis de representatividad ha alejado a la ciudadanía de su clase dirigente, y ese espacio lo llena la participación o la nada.

Resulta evidente que el país busca afanosamente su rumbo de recuperación, aunque todos reconocemos que la profundidad de la crisis institucional y la gravedad de los problemas de legitimidad, confianza, eficacia, eficiencia, corrupción y clientelismo que hemos experimentado, no serán de resolución espontánea y mucho menos que su superación nos llegará desde afuera, ni aún desde el mejor intencionado gobierno de turno, sin una activa y esforzada participación conjunta de la ciudadanía.

En Quilmes, por ejemplo, a 20 años de democracia y con un Diciembre de 2001 marcado a fuego en el calendario público, resulta de imperiosa necesidad insistir en la toma de conciencia generalizada que una profunda revisión y reforma del sistema político resulta imperiosa.
  • Revisar los sistemas disponibles de control de los dineros públicos y de los bienes públicos.
  • Consolidar una efectiva división de poderes del Estado a escala municipal.
  • Fortalecer las instituciones autárquicas de control como la Defensoría del Pueblo.
  • Lograr que las investigaciones judiciales sobre cuestiones públicas terminen en fallos esclarecedores
  • Bregar por el establecimiento de mecanismos trasparentes de acceso a la información en manos del Estado municipal.

    Apoyar las iniciativas que en otros ámbitos tiendan a mejorar el sistema electoral, terminar con las listas sábanas, el centralismo del Estado, disponer de adecuados controles del financiamiento de la actividad política, etcétera.

    A esta altura de los acontecimientos a nadie se le escapa que la reforma política esta en manos de los legisladores nacionales, provinciales y municipales, como representantes de los ciudadanos. Aunque también se reconoce que los legisladores no actuarán sin una fuerte participación ciudadana que reclame sus derechos.

    Pero también es cierto que nadie reclama derechos que desconoce o que descarta por su poco uso y vigencia.

    Los ciudadanos podemos impulsar la reforma, en nuestro caso, comenzando desde el Estado Municipal
  • Podemos cooperar para que se realicen también en las esferas Provinciales y Nacionales.
  • Podemos alimentar el debate, podemos abrir canales no partidarios de la participación, podemos contribuir a generar conciencia y consenso, podemos integrar a los estudiantes al debate, podemos ayudar a controlar el proceso de instrumentación, etc. etc. .

    Aunque deberemos tener siempre presente que las reformas son hechas por los propios políticos.Este proceso requiere, además, un importante consenso de los principales referentes de la sociedad. Dada la actual situación social en nuestras ciudades, una primera tarea será identificar a los referentes actuales de la sociedad, alentarlos a la participación ciudadana conjunta, generar mecanismos de diálogo y cooperación; para luego encarar la tarea mayor que supone ese mismo diálogo y cooperación entre el Gobierno y la sociedad civil.

    En este entendimiento, un grupo de vecinos inquietos, cada uno con su responsabilidad en la ciudad, estamos impulsando la creación de una Entidad civil, no partidaria, que pueda:
  • Articular con entidades que trabajan en el mismo campo a nivel Internacional, Nacional o Provincial.
  • Reunir a quienes desde los sectores más amplios de representatividad vienen mostrandopreocupación por cuestiones públicas locales, provinciales y nacionales.
  • Organizar una base de trabajo, que responda a estándares de eficiencia y trasparencia, apuntando inicialmente a cinco temas:

El Estado - Prensa - ONG's y participación - Cultura – Medio Ambiente.

Pensamos:

  • Que la participación democrática no se agota con la acción de votar.
  • Que la construcción se hace día tras día y que hay lugar para que todos logren intervenir.
  • La participación ciudadana es un punto fundamental en las democracias, y la apoyamos e impulsamos.
  • Que, dada la experiencia, el único cambio estructural posible y democrático en nuestro sistema político-institucional sólo puede esperarse por el impulso y compromiso de la sociedad civil.
  • Que había que articular una masa crítica de personas e instituciones que dieran el puntapié inicial. No para arrogarse representaciones que no ostentan, sino, simplemente, para apelar al derecho de peticionar que tiene cada habitante considerado individualmente y para darle fuerza a ese derecho.
  • Que teníamos que identificar propuestas concretas de cambio que apuntaran a la incorporación de nuevos valores, ideas, conductas y personas, definidas por la transparencia del sistema.
  • Que teníamos que generar apoyo de diversos referentes sociales para que, con el testimonio de sus visiones y convicciones, pudiéramos extender la acción a toda la sociedad civil. De esa manera se pueden generar las condiciones políticas y culturales para que las reformas se produzcan.
  • Que teníamos que evitar que grupos o individuos sacaran provecho individual en desmedro del esfuerzo y la esperanza de todos.
  • Que nuestro crecimiento será directamente proporcional a la reacción que vamos a generar. Sabíamos que íbamos a encontrar desde «observadores» severos hasta personas que han sabido utilizar un sistema que les ha resultado funcional para sus propios intereses. Ocurrirá esto basta llegar a un «punto de quiebre», en el que la tendencia se revertirá y todos jurarán que estuvieron desde el primer momento...

    Por estos días estamos iniciando el camino... algunos de nosotros llegamos hasta aquí, producto de profesiones, Instituciones, proyectos y una larga trayectoria en la defensa de los valores que mejoren la convivencia de las personas y la búsqueda de una democracia mejor y más justa. Estamos de acuerdo que las claves del cambio son: acción, transparencia, coherencia ypersistencia.

    Bienvenido aquel que, desde el presidente de la Nación hacia abajo, luche realmente por laeliminación de las prácticas clientelísticas y en favor del control sobre el financiamiento de los partidos, el acceso a la información pública, la defensa del medio ambiente, del patrimonio cultural de nuestras ciudades y el mejoramiento de la participación ciudadana en la toma de decisiones en cuestiones públicas.Cada uno de nosotros puede ser artífice y parte de un cambio lento, paulatino, pero histórico; cada uno de nosotros puede ser un héroe por haber ayudado a construir una ciudad y una Argentina mejor.

Quilmes, 8 de Abril de 2006

Comentarios y adhesiones:
serciudadano@gmail.com

2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Adherimos fervorosamente a esta iniciativa. Esperamos que pueda ser vehículo de las inquietudes, problemáticas y situaciones de injusticia que vivmos como quilmeños. Agradecemos vuestra participación en la Marcha por el Teatro Municipal.
Amigos del Teatro

4:13 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Al día de la fecha, la indignación que siento por el daño que sufre la comunidad quilmeña me sorprende. Cuenten con todo el apoyo de la juventud.

10:48 a. m.  

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